La leyenda de las gatitas Carey

Dice la leyenda que, muchos siglos atrás, el Sol le pidió a su amante, la Luna, que le tapase por un rato, que le diera un momentito para escaparse del cielo, bajar a la tierra y ser libre, aunque sólo fuera por el tiempo de un suspiro. Lo que el Sol quería era poder ser por un instante normal, no ser el centro de nuestro universo, porque sabía que los seres vivos dependíamos de El para todo, y eso era demasiada presión. La Luna, que tanto le amaba se lo concedió y así sucedió que el día más largo del año, ese día en que el Sol más tiempo brillaba se acercó mucho, mucho a él y fue cubriéndole, paso a paso, con cariño,despacito para que así los seres vivos que tanto le querían y le necesitaban no se asustaran con la oscuridad.

Cuando el Sol se vio libre de poder pasearse por la tierra a la que había dado vida quiso ser uno más entre nosotros y tomar forma para poder sentir. Asi, eligió hacerse corpóreo en el ser más perfecto,rápido y bello que había, una Gatita Negra.

Pero pronto, la Luna, que no estaba acostumbrada a estar despierta de día se sintió cansada, poco a poco se fue quedando dormida y sin querer se fue separando del disco solar al que cubría. Cuando el Sol se dio cuenta, veloz como un gato huyó pero, tan rápido se fue que dejó en su cuerpo terrestre parte de él, miríadas de rayitos solares en el pelaje de la Gatita Negra.

Desde aquel día, todas las gatitas que nacieron de aquella primera gata solar se llaman Gatas Carey. Su hermoso manto oscuro,se ve roto por cientos de rayos rojos, amarillos y naranjas.

(Hay mucha gente que no sabe es que al ser su origen solar tienen propiedades mágicas y ¡si consigues que te adopte una gatita carey atraerás la buena suerte y las energías positivas!)